lunes, 13 de septiembre de 2010

EL NUEVO SUJETO LABORAL


Artículo para la revista  Decisiones en Recursos Humanos


No es ninguna novedad los cambios a los que este fin de siglo nos enfrenta día a día, en especial a los argentinos. Y digo, en especial a los argentinos, pues los cambios  a los que estamos sometidos los ultimos 10 años, habían comenzado hace mucho más tiempo en otras latitudes.Con solo leer El Shock del Futuro de Alvin Toffler, escrito en el año 70, podemos darnos cuenta que lo que él describe ahí, en esa época, estaba muy lejos de lo que nos pasaba a nosotros en esa misma década.
Explicar las causas de esto sería motivo de otro trabajo, y no es mi objetivo en este momento.Más bien de lo que quiero hablar ahora, es de los cambios que,a nivel actitudes, aptitudes y habilidades, nos está sometiendo el nuevo escenario laboral, y relacionarlo con lo que nos exigía en un pasado no muy lejano, y que explica en alguna medida, las dificultades de adaptación por las que está atravesando el sujeto laboral como así también sus respectivas crisis, eso que los gurues del managment llaman el cambio de paradigma, combinado con lo que Tofller llamó el shock del futuro.

Pero antes me gustaría hacer una ambientación, una descripción de los dos contextos: antes y después.Para ello deberíamos abordar,primero,otro concepto muy usado en los ultimos tiempos, y también muy temido que es el de globalización. Lo ire definiendo, también, para saber desde que perspectiva lo estamos abordando.

El Ministro de Trabajo  de Italia,Cesare Salvi,en unos de sus últimos discursos se refirió a la globalización -en virtud de considerarla un potente factor de cambio, que está modificando la geografía económica y política de nuestro planeta- de la siguiente manera:

” La globalización se relaciona con la revolución tecnológica.Sin las nuevas tecnologías de los transportes y de las telecomunicaciones, la internalización de la economía no hubiera podido tener la intesidad y la aceleración que la caracterizan en este momento del siglo.”

Más adelante expresa que no es un fenómeno completamente nuevo, ya que es una tendencia que pertenece a la historia del capitalismo y de la economía de mercado, que se inició muchos siglos atrás,cuando las ciudades comenzaron a desarrollar una tendencia a extender su propio radio de acción,- los propios bancos, los comercios,las finanzas, los seguros- hacia el resto del mundo.Pero considera que, aunque se trate de una tendencia histórica,el proceso de globalización se presenta hoy con características profundamente nuevas que tienen una enorme influencia sobre la vida de los estados, las dinámicas y las vidas de las personas.

Las multinacionales generan un proceso de movimiento,no sólo de capitales, sino también de tecnologías, de procesos organizativos, de difusión de conocimientos.Cuando las grandes empresas abren nuevas fábricas introducen en el proceso de industrialización de los paises donde se instalan, sistemas productivos avanzados, que contribuyen a un salto tecnológico y de profesionalización de la mano de obra, que significa el lado positivo e imprescindible para el desarrollo, pero que también tiene su lado problemático, ya que las grandes multinacionales han elaborado un sistema de división internacional del trabajo que no se  refiere sólo a los países sino a la propia organización interna, han construído un mercado propio de trabajo global.
Dejando a un lado los grupos de alta calificación profesional, estas empresas pueden disponer de una oferta de trabajo en el mercado global, tendenciosamente ilimitada.Y se desplazan de un país a otro, sin vínculos, tratando de individualizar aquellos segmentos del mercado de trabajo global, donde éste sea más abundante, con salarios más bajos, con condiciones de trabajo menos tuteladas, y con sindicatos lo suficientemente débiles como para no ejercer un control excesivo.
Esto genera grandes problemas pues , los países que necesitan inversiones se ven obligados a no ejercer grandes condicionamientos, y para favorecer el ingreso de los capitales deben ofrecer un contexto de desregulación.

Dice más adelante Salvi que la globalización no es solo liberación del intercambio y de las inversiones productivas,sino también liberalización de los mercados financieros, que produce movimientos de capital a brevísimo plazo, con una finalidad especulativa, que pueden perjudicar sin el menor pudor a los países en los que se invierte, ya sea cuando entran de manera descontrolada como cuando se retiran imprevistamente.
Producen así crisis financieras que se propagan produciendo efectos profundamente negativos sobre la economía real de los países donde se invierte.Así vemos países que después de años de crecimiento, al ser  tocados por la crisis entran en una fase de estancamiento, donde aumenta la desocupación y se agravan cada vez más las condiciones de los grupos sociales más débiles.
Así,la globalización y las nuevas tecnologías, han ido cambiando en el transcurso de los años, el rol tradicional económico y social de las ciudades, y no se trata de una transformacion indolora, ya que muchos operarios y empleados vieron desaparecer sus puestos de trabajo en un gigantesco proceso de reestructuracion y reconversion  que fue creando, poco a poco un ejercito de desocupados.
Por otra parte, los nuevos puestos de trabajo que van surgiendo requieren de calificaciones diferentes, que apelan a  habilidades y aptitudes no tenidas en cuenta hasta el momento en un lugar de trabajo, y que generan además, nuevas enfermedades laborales.

Paul Virilio, sugirió hace muy poco, que deberíamos comenzar a hablar del “fin de la geografía”.La tecnología emancipa al hombre  de las restricciones territoriales, produciendo una libertad sin precedentes de los obstáculos físicos y una inédita capacidad de desplazarse y actuar a distancia.

Este escenario que estamos narrando , es un cambio más grande, más profundo y más importante que la revolución industrial.Toffler nos dice que el momento actual representa nada menos que el segundo hito crucial de la historia humana, sólo comparable en magnitud, a la primera gran interrupción de la continuidad histórica: el paso de la barbarie a la civilización.

Sir George Thompson , físico británico, ganador del Premio Nobel indica en El futuro previsible, que el hecho histórico  que más puede compararse con el momento actual , no es la revolución industrial, sino más bien la invención de la  agricultura de la edad neolítica.En la generación actual se ha invertido tanto la relación del hombre con los recursos que la agricultura, fundamento primitivo de toda civilización, ha perdido su predominio en todas las naciones.

U than, Secretario General de UN, expresó que el cambio revolucionario fundamental es que ya no son los recursos los que limitan las decisiones sino que es la decisión quien hace los recursos.

Y en este marco, donde además aparece un cambio acelerado, desigual, e incesante, la llegada prematura del futuro ejerce sobre el sujeto un shock al que Alvin Toffler denominó  el shock del futuro, que genera desorientación e incapacidad para actuar de manera racional en el medio. Este shock nace de la superposición de una nueva cultura sobre la antigua,es la respuesta a un estímulo excesivo, que aparece cuando el individuo se ve obligado a actuar por encima de sus niveles de adaptación.
Pero la adaptabilidad tiene sus límites .Si alteramos nuestro estilo de vida, contraemos y rompemos relaciones con cosas, lugares o personas, nos movemos continuamente en la geografía de la organización social, adquirimos nueva información, y nuevas ideas, nos adaptamos, es decir vivimos. Pero hay límites finitos, ya que no somos elásticos.Cada respuesta de orientación, cada reacción de adaptación, exige un precio : gasta poquito a poco la maquinaria del cuerpo, hasta que algún daño se hace perceptible a los tejidos.

Podemos decir hasta acá, que el sujeto actual se mueve, en el marco de la globalización ya descripta, en el angosto desfiladero de la adaptación a los cambios, procurando generar los recursos necesarios para no caer de lleno en el área de shock.
Es necesario reconocer, entonces, que las respuestas pasadas se han vuelto inaplicables y que las instituciones  de las que se espera que instauren un orden, se han convertido en agente de desorden,ineficacia, injusticia y parálisis.

Veamos entonces cuáles son los cambios que se comenzaron a producir a nivel organizaciones laborales, en sinergia con los producidos por la globalización.

Partimos de un modelo burocratico de organización caracterizado por:
la centralización del poder, en un marco de roles prefijados rígidamente y donde se refuerza la jerarquía de la autoridad formal.
Sus unidades de análisis determinan la estructuración del poder de manera descendente.Estas sociedades son unidades aisladas,que desarrollan culturas que preservan sus identidades a toda costa, y que no se plantean necesariamente, ninguna sintonía con el entorno,más bien se hayan centradas sobre sí mismas, y ajenas a los que sucede a su alrededor.
Este sistema así planteado favorece la existencia de las partes aisladas,separadas e intercambiables.
El modelo de relación entre partes esta fundamentado en la teoría del conflicto y la confrontación de parte contra parte.
Hay un culto al experto, al individuo aislado  que conoce muchos trozos sueltos  de información o de experiencia, pero que puede llegar a ignorar el todo integral.
Las partes son independientes entre sí y del propio conjunto, que a su vez está sujeto a fragmentación y esto acentúa el punto de vista individual.
Por otro lado, las leyes que determinan las relaciones entre las partes  se encuentran estrictamente determinadas y el modo de relación habitual es de línea descendente.
La previsión es moneda corriente, precisamente por la posibilidad de determinar con anticipación lo que va a suceder y los hechos se relacionan entre sí de manera causal.
Las cosas tienen una posición o una identidad muy definida y cada una ocupa un lugar definido en el espacio y el tiempo.
Todo está enmarcado dentro de la Teoría X de Mc.Gregor, quien decía que el sujeto laboral se caracteriza por que no está predispuesto al trabajo y huye de él cuando puede, necesita ser conducido ,evita las responsabilidades y tiene poca ambición, además quiere seguridad para todo lo que lleva a cabo.
La presión, el castigo y el empleo de todos los medios de control de la empresa garantizan un comportamiento conveniente a las necesidades de la organización.
El dinero se considera el único incentivo real que posee el trabajador.

En cambio las organizaciones modernas están basadas en planteos  totalmente opuestos.
En principio, el sujeto laboral está considerado de acuerdo con la Teoría Y de Mc.Gregor, quien plantea que:
El trabajo corporal e intelectual es tan natural como el juego o el descanso. El hombre medio no rechaza básicamente el trabajo, por el contrario, puede conseguir una satisfacción total en él.
Se puede conseguir que el ser humano dirija sus esfuerzos a la realización de objetivos de la empresa sin controles ni amenazas. Si está interesado en la realización de los objetivos , dirige sus esfuerzos incluso por sí mismo hacia ellos y ejercita el autocontrol. Su compromiso dependerá de la utilidad o el beneficio que signifique para él la realización del objetivo.
Este beneficio consiste, sobre todo , en la satisfacción de motivos más altos que puede experimentar totalmente con la realización de los objetivos de la empresa.
El ser humano no sólo se encuentra dispuesto a admitir responsabilidades en condiciones adecuadas, sino que busca incluso mayor responsabilidad.
Un gran número de personas poseen suficiente capacidad intelectual y creatividad como para aportar una contribución importante a la solución de problemas de la empresa.

Por otra parte, las organizaciones actuales están basadas en la capacidad para moverse de acuerdo con lo que su contexto marca, en un ambiente sujeto al cambio permanente, sin posibilidades de establecer previsiones, ya que el futuro es probable, pero nada es seguro.La realidad es situacional.
Se busca la descentralización del poder, y se estimula por lo tanto el empowerment.
Se producen permanentemente ventas y asociaciones, algunas temporarias-join venture- fusiones y adquisiciones.
Las partes son consideradas interdependientes unas de otras, integradas, armónicas, donde el todo es más que la suma de las partes: sistema.
La comunicación como el poder es circular.
Se favorece el trabajo en equipo, y éste es considerado como una célula organizacional, que permite arribar a soluciones más integrales, sobre todo cuando éstos se organizan a partir del criterio de la interdisciplinariedad.
Ya las opciones absolutas  e irreductibles no son la solución a los problemas, se busca ir más allá de las dicotomías, en búsqueda de poder lograr puntos de acuerdo y de encuentro entre las partes en conflicto por lo que surge el concepto de mediación.

En este marco es que quiero analizar cuáles son las habilidades, actitudes y aptitudes que cada modelo, le exige al sujeto que trabaja,y qué modelo de estilo de personalidad favorecen cada una de ellas.

Durante el industrialismo,en la forma de organización dominante, la burocracia, la fábrica,ideada para extraer productos estandardizados, producía,también,decisiones estandardizadas.
Fente a la división maquinal de funciones y la exigencia de llevar a cabo actividades rutinarias,permanentes y con una autoridad vertical escalonada, en la que las decisiones se tomaban en la cúpula, y el trabajador se limitaba a cumplirlas ,no siendo por lo tanto responsable de sus actos, al sujeto no le quedaba otra, para ser funcional al sistema, que exacerbar las características obsesivas de su personalidad.

Si revisamos lo que dice David Shapiro, en su texto Los Estilos Neuróticos,respecto del estilo obsesivo compulsivo, vamos a poder ver con mayor claridad, porqué éste es el estilo prevalente en los modos de organización burocratica.

Wihelm Reich decribió los caracteres compulsivos como máquinas vivientes.La forma de pensamiento de este estilo se haya marcada por la rigidez, y por cierto modo de tensa actividad.

El obsesivo compulsivo, para Shapiro, posee tres aspectos de funcionamiento característico:
·         Rigidez,
·         Modo de actividad y distorsión de la experiencia de autonomía
·         Pérdida de la realidad.
El primero y el tercero constituyen aspectos del conocimiento y del pensamiento, el segundo se refiere al tipo de actividad que con frecuencia se describe como “impulsada”, y está referida a la forma de su experiencia subjetiva.

·         Rigidez:
Se refiere a una tendencia general a persistir en un curso de acción que se convirtió en impertinente o hasta absurdo.Describe además, un estilo de pensamiento, el rígido, que también se describe  como dogmático u obstinado. Suele ser difícil conversar con ellos ya que son oposicionistas, no se experimenta con ellos ni un acuerdo ni un desacuerdo verdaderos,y eso hace imposible poder lograr una unificación de criterios, se percibe la sensación de no ser escuchados, y de recibir solo una atencion superficial.
Esa desatencion a la que se hace referencia hacia los nuevos hechos o hacia formas de ver las cosas de manera distinta es la que sustenta la rigidez, no aceptan escuchar nada que cuestione sus puntos de vista.
Por otro lado,la característica más conspicua de la atención del obsesivo, consiste en su foco intenso, exacto,no padecen de vaguedad de atención: se concentran y particularmente lo hacen sobre el detalle.
Se interesan y sienten cómodos con los detalles técnicos.Esta aguda atención,en ciertos aspectos resulta limitada tanto en movilidad como en extensión.Hay características del mundo que se le escapan por tener un enfoque tan centrado en un punto.Suelen ser imperturbables.
y poseer un interés agudamente definido por algo y se adheiren al mismo, lo persiguen y suelen obtener éxito: pueden ser excelentes especialistas.
Los elementos de la periferia de la atención, lo nuevo, lo sorprenden.Aquello que puede ser aprendido de modo impresionista, constituye una distracción desgarradora para ellos y es eludido con exactitud por la intensidad y la estrechez de su preocupación fija en su propia idea u objetivo.
Poseen una “activa desatención” a cualquier influencia externa o a cualquier idea nueva.
Están dotados, por lo tanto, de una excelente facilidad técnica.Pensemos, por ejemplo, en el personaje de CarlitosChaplin en Tiempos Modernos.


·         Forma de actividad y distorsión general de la experiencia de autonomía:

En el estilo obsesivo, la experiencia afectiva como un todo, se retrae y disminuye.Suelen ser muy activos en las tareas, por lo que pueden llevar adelante rutinas intensas..
Muchos síntomas compulsivos consisten, justamente, en grotescas interpretaciones de tales actividades.

Por ejemplo:

Pueden pasarse todo el día limpiando y relimpiando el mismo lugar.
Pueden transcribir cuidadosamente en tarjetas de archivos, datos que
a veces, son innecesarios.

Pero además, esta acción posee una particular calidad subjetiva: tensa deliberación, reflexión, sentido del esfuerzo, de penosa prueba.
Toda actividad parece ser cumplida de manera tal que mida su capacidad,por lo que el trabajo es para él, el área de existencia predilecta.
La actividad que llevan a cabo tiene la apariencia de estar presionada o motivada por algo que está más allá del interés de la persona actuante.No se muestran entusiasmado por lo que hacen, se sienten obligados a hacerlo, es más, no se permiten el entusiasmo.
Pero no sólo sufren esta presión interna, sino que también la establecen.El individuo ejerce una presión más o menos contínua sobre sí mismo y además, vive y trabaja bajo la fuerza de tal presión.
Funcionan como su propio inspector emitiendo órdenes, directivas, recordatorios, advertencias y amonestaciones sobre lo que se debe y no se debe hacer, lo que se desea, siente y piensa.
El contenido de su pensamiento es : yo debo.
Son personas voluntariosas, cada acción, cada dirección es pensada, cargada de deliberación , como si fuera un acto de estado. No sólo no toleran interferencias por parte de otros,  sobre su propia dirección voluntaria, en razón de su tenacidad, sino que tampoco soportan interferencias de sí mismos.
Aparece una característica que es el “poder de voluntad” que se adapta a la actividad laboral rutinaria, y que se basa en la experiencia de emitirse a sí mismo órdenes y directivas voluntarias.
Este estilo de actividad implica un tipo especial de autoconciencia: la del inspector sentado detrás y emitiendo órdenes, directivas y recordatorios.Es la autoconciencia de una persona que trabaja bajo presión y con un cronómetro en la mano.Esto me recuerda a algunas escenas de la película La clase obrera va al Paraíso, que transcurre básicamente, dentro de una fábrica y donde aparecen escenas en las cuales todo esto que estamos describiendo se ve dramatizado.

Para estas personas es importante tener bien presente que son esto o aquello: tiene especial interés en establecer con claridad su papel.Una vez que se establece en su mente un rol, se convierte en directiva general para su comportamiento, que con frecuencia puede llegar hasta incluir detalles de la expresión facial, formas de hablar y decir. Tienen especial conciencia de su papel profesional y lo actúan.Obtienen la identidad a partir de lo que hacen: son por lo que hacen.
Por otro lado, siempre sienten que se están recordando a sí mismos alguna necesidad objetiva obligatoria, alguna autoridad  imperativa o superior  a su elección o deseo personal a la que están obligado a servir,por ejemplo: la expectativa del jefe hace necesario terminar temprano el trabajo.
Se perciben bajo la amenaza de posibles críticas del peso y la dirección de la opinión autorizada, de las reglas, reglamentaciones y convenciones y quizás, por encima de todo, de un gran conjunto de principios morales o casi morales.
Reconocen la autoridad y se presionan para obligarse a cumplir.
Shapiro, aclara además, que el obsesivo, se mantiene listo para el deber, dispuesto para ejercitar el poder de voluntad, presto para trabajar, pero debe tener alguan directiva autorizada que trasmitirse a sí mismo.
Esta gente sienten y funcionan como autómatas dirigidos y laboriosos, presionándose para cumplir interminables deberes, responsabilidades y tareas que, a su criterio, no son elegidas, sino que simplemente están y hay que hacerlas.
En su trabajo, actúan mejor sintiendo que poseen su propio y pequeño compartimiento detrás del cual se dedican a cumplir sus deberes establecidos, ordenados por autoridades superiores.Sus decisiones quedan limitadas al aspecto ténico, a la mejor forma de cumplir con los plazos o de satisfacer expectativas.Sus satisfacciones no se relacionan con la decisión y libertad, sino con el deber cumplido en ese momento, la autoridad temporariamente complacida y la satisfacción de ejercitar un virtuosismo e ingenio técnicos altamente desarrollados.

Sus aspectos morales en relación al  yo debo está demás decirlo que se refiere  a la función del superyo.Es capaz de rechazar cualquier oferta aparentemente confortante, de alivio de las rigurosas órdenes de su conciencia.Vemos como estas características reducen, no sólo el trabajo, sino la vida misma.
En general, sienten que cualquier relajación de la premeditación o de la resolución es inadecuada o para peor: Si no están trabajando, sienten que al menos deberían estar pensando en algún problema.
No están cómodos con ninguna actividad que carezca de objetivo o propósito más allá del propio placer.

Existe además, otra clase de experiencia psicológica muy fastidiosa que es el proceso de tomar decisiones, para lo cual este estilo es el menos adecuado.
La dificultad e incomodidad que experimentan cuando hay en perspectiva una decisión a adoptar, se explica como un reflejo de su ambivalencia.
Rehuyen los actos de decisión.
Para una persona conducida por un sentimiento de presión y guiada por directivas morales, para un rígido soldado dedicado sólo al deber y aislado de sus propios deseos, el acto de decidir que por su naturaleza gira alrededor de necesidades o deseos y normalmente trae consigo una sensación de libertad y de libre elección ,sólo puede ser terriblemente incómodo.
Cuando se ve obligado a hacerlo, trata de arribar a la solución invocando alguna regla, principio o requisito externo que podría proporcionar una respuesta correcta y así la decisión queda reducida al problema puramente teórico de aplicar el principio correcto:  lo  qué debe hacer.

·         Pérdida de realidad:

El obsesivo posee dudas ante cuestiones obvias, en circunstancias donde la falta de información que puede dar origen a la duda normal no puede ser explicable.
Esto les hace perder la experiencia de convicción respecto del mundo, una sensación de verdad. En otras palabras, implica una amplitud de atención, un interés por y una sensibilidd ante las sombras y proporciones de las cosas y una habilidad para la respuesta directa a todo aquello para lo que el obsesivo no está preparado o equilibrado.
En cambio, se preocupa por detalles técnicos, por indicadores que interpreta de acuerdo con reglas y principios autorizados.En consecuencia, no dirá  es sino se adecua.
Aparecen el dogma y la duda como defensas contra la experiencia de convicción más directa y espontánea.
Por último diremos que el obsesivo tiene gran interés por el ritual: al que se lo puede formular en términos de mecánica esforzada y concebida al servicio de una directiva externa. Por lo que las tareas rutinarias favorecen la expresión de este tipo de conductas, de la misma manera que el reproducir normas y reglas dadas por otros evita la exigencia de tener que elegir algún curso de acción determinado y micuo menos de hacerse responsable del mismo.

Si relacionamos, ahora, los aspectos descriptos en relación al estilo obsesivo compulsivo, prevaleciente en las organizaciones del viejo paradigma , con el concepto arriba descripto como shock del futuro, nos podemos dar cuenta, así, aunque sea intuitivamente, la difícil situación vivida por estos trabajadores . Con las característica obsesivas favorecidas y afianzadas ampliamente por ese modelo debieron y deben, cotidianamente, enfrentarse al cambio, a la polifuncionalidad, a la inestabilidad, la flexibilidad, y la toma de decisiones, por decir sólo algo de algunos de las exigencias que el nuevo paradigma tiene sobre los sujetos laborales. Esto es parte de lo que explica el sufrimiento de toda una generación de trabajadores, que no sólo pasa por no tener trabajo, sino también, por tener que enfrentarse a un modelo,del que no tienen registro anterior, es más, se les exige que sean y que hagan lo que antes se les prohibía.

Veamos ahora las caracteristicas que impone este nuevo modelo.

Toffler nos dice en su libro La empresa flexible que en una sociedad superindustrial la burocracia será reemplazada cada vez más por la adhocracia, estructuración semejante a una compañía que coordinará el trabajo de numerosas unidades laborales temporarias las que existirán y dejarán de existir  con arreglo al ritmo del cambio en el medio ambiente que rodee a la organización.
Esa evolución está ya prevista en muchas industrias, si se considera la rápida proliferación de organizaciones temporarias como agrupaciones para tareas especiales, equipos de proyectistas, grupos para informar y resolver problemas y otros análogos.Más adelante agrega

Estas nuevas organizaciones requieren hombres y mujeres capaces
de aprender a prisa, parapoder asimilar circunstancias y problemas
nuevos y con gran imaginación para inventar soluciones nuevas.
En suma, el hombre corporativo del mañana no deberá actuar con
arreglo al reglamento si quiere solventar problemas que se den por
primera vez o sólo una vez.
En su lugar deberá capacitarse para emitir juicio y tomar deicisiones
sobre valores complejos más bien que cumplir maquinalmente, órdenes
provenientes de arriba. Por añadidura, deberá mostrarse dispuesto
a navegar entre muy diversos cometidos y escenarios organizativos
 y animarse a trabajar con un grupo cambiante de colegas.

Frente al estilo de sujeto obsesivo descripto tan ajustadamente por Shapiro, nos encontramos ante la demanda de un sujeto flexible, es decir, un sujeto que cuente con la movilidad volitiva de la atención. Se hace posible en este otro modelo de sujeto,la dirección y mantenimiento de la atención a voluntad, en formas tales como la concentración sostenida.
También requieren la aptitud de un individuo para autodirigirse, es decir para dirigir los diversos aspectos de su comportamiento, sus acciones, su atención, hasta una extensión determinada. En suma: la capacidad para tener un funcionamiento autónomo.
Y si la capacidad volitiva y el sentido de autonomía están bien establecidos, pueden relajarse para hacer sitio a la fantasía, al juego, y a la espontaneidad de la expresión afectiva.

Sigmar Malvezzi,en una de sus conferencias nos dice que la eficacia, en este nuevo modelo, dependerá de la posibilidad de adaptación de los individuos más que de la racionalziación de las actividades, y además agrega que si en la gestión tradicional, la acción procede de una estrucutra estática, es decir  todo debe tener un lugar ,una función  como en la orquesta, en el nuevo modelo, la acción procede de interacciones e impactos basados en la ecodinámica de los procesos como en el juego de basquetball.
Se pasa de un sujeto ordenado, con una fuerte identidad laboral, a un sujeto que se sostiene, básicamente en su posibilidad de sonbrellevar exitosamente el cambio.De un sujeto que busca ser aprobado por el jefe, a aquel que obtiene la gratificación por los resultados que obtiene.

Como vemos, se marcha hacia la demanda de un sujeto maduro emocionalmente, con independencia de criterio, y capacidad para defender sus ideas, para autocontrolar sus tareas, y actuar creativamente, en suma, a un sujeto equilibrado que pueda permitir la indeterminacion de la acción que debe desarrollar. Un equilibrio que es inseparable de la confianza en uno mismo, para poder llevar la acción por el camino correcto.

Y como reflexión final y a modo de sintesis quisiera traer algunas reflexiones de Alain Tourraine en su libro Podremos vivir juntos, donde nos dice:

….el único lugar donde puede efectuarse la combinación de la instrumentalidad y la identidad, de lo técnico y lo simbólico, es el proyecto de vida personal, para que la exietencia no se reduzca a una experiencia caleidoscópica, o un conjunto discontínuo de respuestas a los estímulos del entorno social. Este proyecto es un esfuerzo para resistirse al desgarramiento de la personalidad y para movilizar una personalidad y una cultura en actividades tecnicas y económicas, de manera que la serie de situaciones vividas forme una historia de vida individual y no un conjunto incoherente de acontecimientos.
En un mundo de cambio permanente e incontrolable no hay otro punto de apoyo que el esfuerzo del individuo para transformar unas experiencias vividas en la construcción de sí mismo como actor. Ese esfuerzo por ser un actor es lo que denomino Sujeto, que no tiene otro contenido que la producción de si mismo.No sirve a ninguna causa, ningún valor, ninguna otra ley que su necesidad y su deseo de resistirse a su propio desmembramiento en un universo en movimiento sin orden ni equilibrio.

Las organizaciones son productos del ambiente en que se desarrollan, es decir, son situacionales,por lo que lo que hacen es mostrar lo que sucede, actuando como voceras del momento histórico en que les toca vivir.
Por su parte, el hombre como tal, debe desarrollarse , madurar y desenvolverse, más allá de lo que ellas marcan y demandan, pues de lo contrario terminan estando a expensas de ellas. Y al ser así, quedan entrampados, y cuando se produce el cambio, los encuentra inermes y desarmados para poder enfrentarlo y salir airosos de él.

Creo que en esta mutación a la que estamos sometidos en este cambio de siglo apunta a ésto: a generar hombres más independientes y más centrados en sus propios deseos y necesidades, más centrados en : yo quiero   que en  yo debo.

Prof.Graciela Leticia Filippi
Psicóloga

Prof. Titular Regular
Psicología del Trabajo
Fac.de Psicología UBA

Consultora de Empresas

www:gracielafilippi.com.ar











































































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